Fallar no es lo importante… ¡lo importante es como te repones a ese fallo.!

“Cómo he podido fallar esa ocasión tan clara…”, “cómo me ha entrado ese golpe…”, “cómo he fallado esa parada…”; etc.

Todos odiamos fallar, eso está claro, pero que lo odiemos no va a significar que vayamos a dejar de equivocarnos.

¿Prácticas algún deporte? Siento decirte que, casi con toda seguridad, VAS A FALLAR.

Y no, no es que sea adivino, y mucho menos te desee algún mal, es solo que no somos máquinas perfectas, nos equivocamos en todos los aspectos de la vida, ya sea en mayor o menor medida, y el deporte no iba a ser un caso aparte.

Asimilando el hecho de que alguna vez tendremos que equivocarnos, la clave estará en CÓMO NOS REPONEMOS DE ESE FALLO.

Cuando cometemos un error, podemos comenzar a decirnos frases como las del principio del texto que, por otro lado, son totalmente lógicas…

Sin embargo, ¿Hasta qué punto te están ayudando?

Pues si tu competición continúa mientras tú te quedas ensimismado con pensamientos inútiles sobre el error que acaba de suceder, no te estará ayudando en nada. Obviamente, te puedes sentir desanimado por tener un fallo que consideras “tonto”, pero no quitar la atención de esa equivocación solo aumentará la probabilidad de que ocurra otro, ya que, no centras la atención en lo que realmente importa, EL PRESENTE.

LA COMPETICIÓN NO VA A PARAR porque falles, por tanto, NO PARES TÚ tampoco, cuando acabe tu prueba, tendrás tiempo para meditar qué puedes hacer para no fallar en una próxima ocasión. “A por la siguiente jugada”, “todavía queda partido”, “un fallo lo tiene cualquiera”, “luego tendré tiempo para pensarlo” son pensamientos que te ayudarán a no darle vueltas innecesarias al error y seguir concentrado en tu misión. ¿Acabas de fallar…?, ¿cuántas vueltas le vas a dar al mismo fallo…?

Recuerda que… ¡el que tiene boca se equivoca!

Sobre el autor

José García Donate

Fundador de Donatealdeporte y director de la unidad de psicología del deporte y actividad física en el instituto Centta